Nuestro recordado goleador Héctor Fabián Arias está de visita en Trujillo y compartió importantes vivencias y todo el sentimiento que mantiene por el Club Carlos A. Mannucci a pesar del paso de los años. ¡Mira el video!
Agradecemos por las imágenes del recuerdo a Ricardo Cruzado – Sol TV.
Acá sus principales declaraciones:
¿Cómo te sientes de volver a ver a Mannucci después de varios años?
Una de las cosas que más me alegra es que haya gente joven que quiere aportar al equipo y brindarle a esta institución tan linda. Soy alguien que peleó siempre por esta camiseta. Siempre estuve agradecido al club que me abrió las puertas y que prácticamente me formó como futbolista y como persona.
¿Cómo fue tu llegada a Mannucci en el año 93?
Llegué muy joven. Era una situación difícil para el club pero había chicos con ganas de salir adelante. Pasamos momentos muy difíciles durante la semana, pero siempre con la disposición de entrenar. Había gente humilde que nos fortaleció más. Recuerdo a Salomón, Didí, Ganoza, Zapata, “Michilón” Heredia, Chávez, gente muy linda. “Luchito” Collao que era un gran proyecto de nosotros.
Tuviste una breve ausencia de Trujillo…
Me fui a El Aguila de El Salvador por 6 meses pero no aguanté y me vine. En esa época el país atravesaba una época muy difícil con la guerrilla. Regresé y encontré a otra gente que manejaba el club. Supuestamente íbamos a hacer las cosas diferentes. Administrativamente se hicieron bien, pero deportivamente no.
¿Cuáles crees que fueron las razones del descenso?
Se confió en jugadores que no dieron la talla, faltó profesionalismo, se rompieron muchos códigos y se pagó descendiendo de categoría. Cuando uno cree que por tener el poder económico ya levantó la copa está equivocado. Cometimos muchos errores como cambiar tantas veces de técnico. Se manoseó mucho a los jugadores, venía uno se iba otro y no podíamos enfocar un sistema de juego. Teníamos gente de mucho dinero, pero no teníamos un líder que nos iba a llevar al éxito. Ninguno dio la talla. Hasta el último momento creí que nos íbamos a salvar.
¿Cuál es el gol que más recuerdas con Mannucci?
Hice varios goles, goles lindos, pero ninguno sirvió para la meta que tenía de no descender nunca con el equipo. Fue lo más duro que me tocó vivir como futbolista en mi carrera.
¿Cómo le fue a Fabián Arias luego de su paso por Mannucci?
Jugué en España, México, Perú, Ecuador. Me fue muy bien en mi carrera gracias a Dios. El momento más feliz lo pasé en Deportivo Quito, salí goleador, clasificamos a la Copa Libertadores, pero siempre sentí que mi casa era aquí. Si tuviera que salir de mi país para vivir, viviría aquí. Me siento identificado acá. Quizá la gente no lo pueda entender pero Mannucci fue y será el equipo que me abrió las puertas. Sentí un gran aprecio y cariño desde el primer día. Un cariño muy grande.
¿Qué anécdotas nos podrías comentar de tu paso por Mannucci?
- En Lima que se cayó la bandera y nos robaron el partido. Patea uno de ellos y no sé si la pelota entró pero el árbitro cobró el gol. Estaba la bandera y lo impidió, pero el árbitro cobró el gol.
- Una persona que nos dio una identidad y nos hizo reflexionar fue Jose Carlos Trasante. Nos ayudó mucho con su idea y estilo de juego.
- Siempre le decía a Salomón que el extranjero tiene que marcar la diferencia, sino no sirve. El me decía. “Bueno, te estamos esperando”, por lo que yo le respondía. “Bueno a mi me dijeron que había un Cueto en Mannucci, también lo estoy esperando”.
- Cuando compartía cuarto con el “Charro” González, siempre le decía que era uno de los mejores arqueros que yo vi en el Perú. Tenía unas condiciones increíbles.
¿Qué destacas del Mannucci actual?
La seriedad con que vienen trabajando ahora. Tener bien a los jugadores para que puedan hacer su trabajo tranquilos. Hay que seguir confiando en la gente que tiene el equipo ahora, trabajando con seriedad, y creo que el equipo va a volver a Primera, pero hay que trabajar mucho, las cosas no son de un día para otro.
¿A qué te dedicas actualmente?
Siempre quise seguir ligado al fútbol. Me ofrecieron ser técnico en varios equipos pero no es lo mío. Me dedico a buscar talentos y dar el crecimiento del futbolista que yo no pude tener.
¿Qué piensas de los mensajes que te han enviado los hinchas por nuestras redes sociales?
Es muy emocionante saber que la gente lo recuerda a uno de la mejor manera a pesar de tantos años que pasaron. Quiere decir que uno hizo bien las cosas. Una de las cosas que más me emocionó fue leer que gente le puso mi nombre a sus hijos, eso es muy emocionante.
¿Te gustaría seguir apoyando a Mannucci?
Hoy estoy aquí, se lo dije a la directiva. Mis intensiones son las mejores para ayudar y aportar al club, no como técnico, pero tengo otras maneras en que puedo aportar.
¿Qué le dirías a los hinchas que se alejan cuando hay un mal resultado?
La gente tiene que entender que tiene que apoyar en las buenas y en las malas. Yo no conozco un entrenador o jugadores que salgan al campo a perder o a empatar, a dar un pase malo o un centro atrás del arco. El hincha de Trujillo tiene que ser muy fiel con el Club. Cuando se pierde, tiene que saber que el próximo domingo tenemos la revancha. Esto es fútbol. Yo recuerdo que cuando jugábamos el descenso iba mucha gente también. Quiero que el domingo la gente pueda llenar el estadio. No todo está perdido, todavía falta mucho. El hincha tiene que ir y apoyar. Hay que alentar siempre.
¿Cómo quisieras ver a Mannucci?
Quisiera ver al equipo en Primera División, ver el estadio lleno de gente. Siento que puedo llegar a ver al equipo jugando Copa Libertadores, Copa Sudamericana, pensando en grande. Si se da eso, puedo morir tranquilo. Cuando uno hace las cosas bien en el sentido dirigencial, se logran muchas cosas importantes.
¡Nos vemos el domingo en el Mansiche!
Invito a todos a que vayan. Tienen que ir al estadio a alentar al equipo. Creo que hay buen equipo, hay chicos interesantes. Yo voy a estar ahí alentando al equipo porque me siento identificado, quiero que gané el equipo este domingo y todos los domingos. Quedan 13 fechas y tenemos que apoyar las 13 fechas. Tenemos que hacer valer la localía. En Trujillo son todos mannuccistas y podemos llenar el estadio tranquilamente.